El Gobierno nacional continúa un proceso de degradación presupuestaria y humana que afecta dramáticamente el funcionamiento diario de nuestro instrumento militar. El 02 de mayo (Decisión Administrativa 356/2023) el Jefe de Gabinete autorizó una expansión y reasignación presupuestaria que redujo el presupuesto de la Armada en 156.310.000 pesos para crédito externo.
Este presupuesto estaba destinado para adquirir repuestos y funcionamiento propio del arma. Una fuerza que debe controlar una extensión marítima de 3.744.000 km2 sólo en la plataforma continental y una Responsabilidad SAR (Búsqueda y Rescate) en 14.716.000 km².
El monto asignado para funcionamiento de todo el instrumento militar en 2023 es de 51.756.351.853 de pesos, lo cual representa un aumento del 47% en términos nominales respecto al de 2022. Sin embargo, la inflación prevista para el 2023 se ubicaría por lo menos en el 126,4%, tomando como referencia el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del BCRA de abril. Esto quiere decir que, en términos reales, se va a reducir el presupuesto operativo militar por lo menos un 79,4%.
En el presupuesto aprobado por el Congreso, el Gobierno preveía un 60% de inflación. El porcentaje real va a ser por lo menos el doble de la proyección oficial. Frente a la realidad de una inflación imparable el gobierno no solo no aumenta el presupuesto de funcionamiento de las FFAA si no que lo reduce. El gesto es simbólico pero muy real. Al quitar 156 millones de pesos a la Armada que iban a ser utilizados para adquirir repuestos muy necesarios, el gobierno muestra una vez más que considera a la Defensa Nacional como una variable de ajuste, un ministerio prescindible.
La distancia entre el relato oficial y la realidad cada vez es mayor. El ministro de Defensa se muestra continuamente como un promotor de la recuperación de nuestro instrumento militar, en visitas, fotos y discursos públicos. Cuando fue a defender el presupuesto 2023 actualmente en ejecución, estimó que el FONDEF 2023, fondo que debe representar por ley el 0,8% de la recaudación corriente, sería de unos 160.000 millones de pesos. Este Fondo es crucial para la modernización, la recuperación y la incorporación de capacidades militares. La realidad es que en el Presupuesto 2023 aprobado tan solo figuran 34.000 millones de pesos. El gobierno está sub ejecutando el FONDEF.
Esta realidad, transforma al Ministerio de Defensa en el órgano ejecutor de un ajuste tan grande sobre las Fuerzas Armadas, que peligra no sólo su funcionamiento sino su existencia.
– Carlos Fernández –
El presupuesto de funcionamiento de Defensa para 2023 tan solo alcanzaba para 60 días de navegación de la Armada para adiestramiento naval técnico y táctico. Hace diez años, la Armada tenía a su disposición 358 días de navegación. Con esta decisión pasamos de una fuerza que se adiestraba todos los días del año a un elemento clave que sólo funcionará 30 días al año. Similar es el caso del Ejército Argentino. Según el presupuesto 2023, dispondrá de apenas 3 días de adiestramiento operacional en campaña (fuera de sus cuarteles) y de 15 de adiestramiento operacional en guarnición (dentro de sus cuarteles). En 2012, el Ejército se adiestró 27 días en campaña y 40 en guarnición. El adiestramiento fuera de los regimientos, cayó casi un 90% en 10 años.
Siguiendo esta lógica, el gobierno está creando algo nunca visto en el mundo, una Defensa part-time.
– Carlos Fernández –
Frente a esta política no escrita de continuo desarme unilateral, es necesario generar un Nuevo Consenso Democrático de la Defensa. Como primera medida debemos frenar la diaria degradación de las Fuerzas y garantizar un presupuesto básico de funcionamiento. Una vez estabilizada la crisis, es necesario comenzar un proceso real de adquisición de capacidades militares, equiparación salarial con las FFSS y jerarquización dentro de un plan estratégico de Defensa 2035. Debemos poder volver a controlar nuestros espacios soberanos, nuestro Mar Argentino, espacio aéreo, fronteras terrestres y dominio ciber. Si la Argentina quiere ser un país que proyecte confianza y seriedad al mundo, que atraiga inversiones. Debemos poder defendernos y proteger nuestros valiosos recursos. Una Defensa Nacional bien equipada es fundamental para que el país triunfe en el actual escenario internacional.
Carlos A. Fernández
Presidente de la Convención Provincial UCR
Presidente CEDySEG
Publicado en “Zona Militar”
