El Concejo Deliberante de Avellaneda aprobó por mayoría la ordenanza Fiscal Impositiva, que establece un aumento del 84 por ciento de las tasas para el 2023, pese a la negativa de los ediles de la Unión Cívica Radical.
La jornada comenzó con la Asamblea de Mayores Contribuyentes, que trató la suba de tasas. En ese marco, el concejal de la UCR, Silvia Diana, explicó que “en otros distritos se pone un menor porcentaje y cuando va aumentando la inflación incorporan esos aumentos y no tienen un fuerte sacudón a partir de enero cómo acá”.
Para el correligionario Fernando Landaburo, “el aumento de 89 % de las tasas municipales desde el 1º de enero está fuera de la realidad que viven nuestros vecinos”.
Esta Tasa pasará a tener un valor mínimo cercano a los 3.750 pesos, mientras que los comercios que tengan hasta 40 metros cuadrados abonarán 7.925, más 69 pesos por cada metro cuadrado extra. Además, las industrias deberán pagar 69 pesos por metro cuadrado y 91 si realizan actividades con elementos inflamables o contaminantes.
Los cuestionamientos hacia el intendente Jorge Ferraresi es que siempre acompañó el valor de las Tasas acorde a la inflación, “y en algunos casos por encima de esos valores”, ejemplificando el caso de la Tasa de Alumbrado, Barrido y Limpieza de la Ciudad de Buenos Aires, que es menor que la Tasa por Servicios Generales de Avellaneda”.
Respecto al Presupuesto, Landaburo cuestionó el proyecto indicando que “parece que la prioridad para el Ejecutivo es pasar a gastar 2 mil millones de pesos en el Museo de Fútbol. Claramente no podemos coincidir en esas prioridades”, y que los ingresos “están subestimados y, además, hay cosas que no figuran que nosotros consideramos que deberían ser parte de una gestión, de un plan de gobierno del municipio de Avellaneda”.