Paradójicamente este domingo, el día que celebramos la niñez, en el interior de la provincia de Buenos Aires algo tan hermoso como compartir un partido de fútbol en familia no se puede disfrutar.
Una vez más el gobierno de la provincia de Buenos Aires se equivoca en las medidas que toma para todo el territorio de la Provincia, sin diferenciar las distintas realidades de una provincia extensa y diversa.
Una vez más el gobernador Axel Kicillof -que se enoja cuando hablamos de crear provincias nuevas, más chicas, austeras y cercanas-, hoy nos demuestra que es un gobernador lejano a la realidad y por haber realizado toda su carrera política en la ciudad de Buenos Aires, que llega al cargo desde la Política Nacional, desconoce totalmente la realidad de la provincia, sin pensar en la diversidad que existe en la misma.
En los pueblos del interior el domingo es una fiesta porque las tribunas se llenan de alegría, porque se disfruta de un día compartido entre familias, niños, niñas, amigos y vecinos.
Lamentablemente por decisiones injustas este domingo no tenemos fútbol en el interior.
Lamentablemente por no entender la realidad que viven los pueblos, este domingo los niños y niñas no festejan en la cancha.
El mismo partido político que ayudó a los barrabravas de Hinchadas Unidas Argentinas a viajar a los mundiales, les prohíbe a las familias del interior ir a ver al hijo, nieto, sobrino o vecino, jugar en el club del pueblo.
Que este ejemplo de protesta de los clubes del interior sirva para que se entienda cuando hablamos de inequidades a la hora de gobernar. No todas las realidades son iguales.
Emiliano Balbín
Diputado provincial UCR
